viernes, 20 de marzo de 2020

Me quedo en casa.Proyecto los piratas.







En los próximos días vamos a trabajar con nuestro Proyecto.

La importancia de contarles cuentos a los niños.

 

  • El escuchar cuentos hace a los niños más reflexivos, ya que en éstos siempre encontraremos un mensaje que los lleve a comprender la forma en que deben actuar y comportarse, a saber distinguir entre lo bueno y lo malo.
  • Le ayuda a combatir sus propios temores. En muchos de los cuentos el niño se puede identificar con las emociones de los protagonistas.
  • Se estimula su memoria y sus ganas de expresarse.

Siempre después de contar un cuento, hacemos una serie de preguntas para saber si han entendido el mensaje.



                                                   


Había una vez un papá que tenía tanta prisa por acabar los cuentos que contaba a sus hijos cada noche, que empezó a recortar palabras. 
 Quitando palabras de aquí y de allá era capaz de terminar los cuentos un poco antes.
Pero como nada le parecía suficiente, siguió recortando más y más, hasta que un día, sin darse cuenta, recortó la palabra más importante de un cuento: se comió la palabra “FIN”.
                                 
  

Aquella noche se fue tranquilamente a la cama, pero al despertar se sintió raro. Se levantó y, al mirarse en el espejo, ¡descubrió que tenía un gran sombrero de pirata, un negro parche en el ojo y una enorme barba de color rojo con lunares blancos! No había duda, se había transformado en Barba Flamenco, el famoso capitán pirata de sus cuentos.

Preocupado, corrió a la habitación de sus hijos. Al abrir la puerta, un muro de agua se derrumbó sobre él y al momento se encontró nadando en el mar. Y no estaba solo, varios tiburones avanzaban hacia él con hambre de seis semanas. Barba Flamenco se preparó para luchar agarrando el cuchillo de untar mantequilla que siempre escondía bajo su sombrero, pero justo antes de lanzarse a por el primero de los tiburones, sintió que se elevaba por los aires y caía en la cubierta de un gran barco de bandera pirata.



- Ha faltado poco, mi capitán- dijo un marinero.

Pero no había tiempo que perder. El capitán fue informado de que la reina había sido secuestrada y ofrecían una gran recompensa a quien la devolviera sana y salva.

Sin dudarlo un instante pusieron rumbo hacia la isla del Último Caníbal.

  Navegaban a toda vela cuando se formó una gran y oscura tormenta , un impresionante rayo  golpeó contra el palo mayor del barco, provocando un gran incendio.
 Atareados con el fuego, no se dieron cuenta de que una enorme ola lanzaba el barco contra las rocas que rodeaban la isla.

                       


Cuando el capitán despertó, se encontraba atado a un gran tronco. A sus lados, también atados, estaban todos los piratas de su tripulación.
Allí estaban los caníbales, Qué pesados, siempre hacían todo cantando. 
 Pero entonces el capitán tuvo una idea. Con voz potente comenzó a cantar canciones piratas, y toda la tripulación se puso a cantar con él a pleno pulmón. Los caníbales intentaban cantar más fuerte, pero aun siendo muchos más, no conseguían superar al capitán y su tripulación.
 Sin sus cánticos no podían empezar a comer así que, rojos de furia, decidieron cambiar  .

                            


Ahora era el capitán quien estaba sobre un gran caldero a punto de ser cocinado.

                                       
Y fue entonces cuando vio a la reina sonreír con aquella sonrisa torcida que solo tenía Flor Marchita. Sin duda todo había sido una trampa de la temible capitana pirata,.
- Has ganado, Flor Marchita. Este es el FIN.


                                 

Con esa última palabra todo desapareció y el papá volvió a encontrarse en su cama, aún asustado y sudoroso.
A su lado, con la misma sonrisa torcida de Flor Marchita, su mujer le regaló un beso, diciéndole:
- La próxima vez que vuelvas a recortarles los cuentos a los niños, te las verás conmigo...

Esa noche el papá se quedó muy pensativo. Había pasado mucho miedo, pero había sido tan alucinante ser parte de la historia, que nunca más volvería a quitarles a sus hijos ni un trocito de sus cuentos.

Os propongo la siguiente tarea.

Sólo necesitais folios ,lapicero y goma.

Paso 1: Dibujamos un barco pirata,lo suficientemente grande para escribir dentro.


Paso 2: Escribimos la serie numérica del 1 al 10.

                                     


Paso 3: Jugamos a anterior/posterior, escribiendo los números en los "ojos de buey "de los costados del barco.

                                   



Otra actividad, es la creación de un Cuaderno de Bitácora.
Es un libro en el que los marinos, registran los datos de lo acontecido.
Nosotros lo vamos a modificar un poquito...

Paso 1: Creación de la portada, y la contraportada de nuestro cuaderno.
Doblamos un folio apaisado por la mitad, piquito con piquito, como decimos nosotr@s.             

                                                  






Paso 2: Escribimos en pauta, y mayúsculas.Está será la portada.

                                                          CUADERNO

                                                                 DE

                                                           BITÁCORA

                                   


 La contraportada, va con el nombre del niñ@.En pauta también.


                                        
Ahora lo decoramos.....Cada uno expresa su arte.
                                     



                                         
En los próximos días  haremos las páginas.
Nuestro amigo Mala Pata..

                                         










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